La terapia contra el cáncer puede afectar su afectividad y vida sexual de diferentes maneras, como por ejemplo:
– Cambio del deseo sexual y disminución del interés
– Cambios de humor, depresión e irritabilidad
– Problemas para conseguir y mantener una erección (disfunción eréctil)
– Cambios en su eyaculación
¿Cómo lidiar con los cambios que afectan mi salud sexual?
Es importante saber que existen factores físicos y emocionales, además de algunos medicamentos, que pueden ocasionar la disminución o pérdida del deseo sexual, por ejemplo:
– Si se siente deprimido o ansioso
– Si siente cansancio
– Si se encuentra preocupado o avergonzado por los cambios físicos
– Si tiene una pareja y ambos se sienten preocupados o ansiosos por su diagnóstico y/o tratamiento.
– Algunos efectos secundarios de tratamientos hormonales contra el cáncer
Intente no avergonzarse de hablar con su médico o enfermera. Recuerde que habrán hablado
sobre estos problemas muchas veces antes. Además de analizar los tratamientos disponibles, también pueden informarle sobre los grupos de apoyo locales o los servicios de asesoramiento disponibles en su área.
¿Qué puedo hacer si presento disminución del interés sexual?
Identifique los cambios
Los cambios que presenta al utilizar terapias contra el cáncer pueden afectar su apariencia física, desempeño físico y estado emocional. Por lo que siempre será importante identificar las situaciones que le afectan directamente.
Pruebe con nuevas actividades
Estos cambios no deberían afectar negativamente su relación afectiva ya que también hay otras formas no sexuales de estar cerca de su pareja: puede empezar con acciones simples como un abrazo o también pueden probar nuevas actividades juntos.
Recuerde que su pareja también se está enfrentando ante este proceso con usted, él o ella puede estar experimentando miedo, negación, enojo, preocupación o ansiedad ante el futuro.
Hable de sus pensamientos y sentimientos
Si tiene pareja, hablar de sexualidad, de sus pensamientos y sentimientos, puede ayudarte a lidiar con el cambio. No siempre es fácil hablar sobre estos temas, incluso para una pareja que han estado juntos por mucho tiempo, pero esta podría ser una oportunidad para acercarlos más y hacer que se sienta más seguro frente a los cambios y desafíos.
Para tener una buena comunicación es importante ser escuchado y escuchar. Escuchar a la otra persona es una forma de demostrar apoyo. Recuerde que las palabras no son la única forma de comunicarnos, también puede hacerse a través de gestos y muestras de afecto.
Está bien tomarse un tiempo
Algunas personas prefieren no hablar del tema, otras personas pueden necesitar un tiempo para procesar sus emociones y preocupaciones o se sienten más cómodos hablándolo con otra persona o con un profesional, cualquiera de estas reacciones está bien y es importante que se lo comunique a su pareja para que lo comprenda mejor.
Si le resulta difícil hablar de este tema, podría ser útil consultar a su médico por una referencia a un terapeuta o profesional capacitado.
Bibliografía
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Cáceres et al., Manual para el paciente oncológico y su familia. Barcelona, 2007.